El día de hoy a las 11 en punto de la mañana, nuestro corresponsal Ricardo Esparza, asistió a la conferencia virtual impartida por el periodista, documentalista y narrador italiano Federico Mastrogiovanni, autor del libro "Ni vivos ni muertos. La desaparición forzada en México como estrategia de terror." Al momento su libro más reconocido, que incluso dio origen a un documental con el mismo nombre.

Esta interesante ponencia fue posible gracias al Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo A.C. Entre sus asistentes se encontraban tanto maestros como estudiantes de periodismo, los cuales pudieron contribuir al final de la exposición con una sesión de preguntas que fueron respondidas por el doctor Mastrogiovanni quien por este medio profundizó en algunos de los conceptos que ahí se tocaron.

Era evidente que el encontrarse de vuelta en casa de sus padres y las calles que lo vieron crecer, causó un dejo de nostalgia en él, esto lo llevó a tener muy presente la figura de su mentor Gianni Minà, un legendario periodista italiano de 83 años en el contenido de la charla.

Inició contándonos todo el conocimiento que este le legó, como estar siempre atento, estar en el lugar y momento oportuno, entre otros. Agregó consejos desde su propia experiencia para ser periodista: “para aprender a escribir hay que empezar a leer” y “leer sobre cualquier tema”, fueron frases en las que hizo mayor énfasis, también el “pre reporteo”, como él lo llamó, o preparación previa a la entrevista es fundamental.

Gracias a esto volvió a referir a su mentor, quien entrevistó a Gabriel García Márquez, autor del titán de la literatura latinoamericana Cien años de soledad. Lamentablemente Minà no conocía nada sobre él y no tuvo tiempo suficiente para preparase, Gabo, como también es conocido el escritor latino, se “enojó” y “humilló” al reportero, luego se negó a concederle la entrevista. Gracias a su habilidad de convencer, Minà logró terminar la entrevista, y no solo eso, terminaron por convertirse en muy buenos amigos.

También hizo mención de otro caso, el de Oriana Fallaci, la periodista italiana que fue herida de bala en la tragedia de Tlatelolco, nos explicó que es imposible no tener empatía cuando se entrevista a víctimas de tragedias pero que hay que entender que se es periodista y no activista, que su compromiso es para con el lector no hacia el entrevistado, el objetivo no es juzgar a los actores del suceso sino tratar de entender y presentar la verdad sobre el mismo.

Poco más de una hora duró esta increíble cátedra de conocimiento periodístico y experiencias narrativas, pero aún así el doctor Mastrogiovanni se mostró afable y de buen humor de inicio a fin, a pesar de que el autor refirió recién haber arribado a su natal Italia y sufrir de la complicación del desfase horario. Terminó agradeciendo por el espacio e invitando a los talleres que él mismo imparte para seguir aprendiendo sobre los temas expuestos.